“Creo que es uno de los finales más luminosos de todos mis libros»
Rosa Montero, escritora y periodista, para muchos es la mejor autora en castellano de la actualidad. Los premios y reconocimientos, el éxito de ventas y de crítica, la sitúan entre los más grandes con una obra traducida a más de treinta idiomas. Como periodista, trabaja para el diario El País y ha obtenido el Premio Mundo de Entrevistas, el Premio Nacional de Periodismo para reportajes y artículos literarios y el de la Asociación de la Prensa de Madrid a toda una vida profesional. Es autora del libro de relatos Amantes y enemigos, Premio Círculo de Críticos de Chile 1999, y dos ensayos biográficos, Historias de mujeres y Pasiones, así como cuentos para niños y recopilaciones de entrevistas, artículos y de veinte novelas con premios como el Premio Nacional de las Letras en reconocimiento a su trayectoria novelística, periodística y ensayística. el Primavera de novela, el de la Crítica de Madrid, el Qué leer, el Grinzane Cavour, Roman Primeur, el Violeta Negra Occitanie o la Medalla de Ora al Mérito de las Bellas Artes.

Rosa Montero ha presentado varias de sus obras en Pegando la hebra y hoy lo hace con el último volumen de la tetralogía de Bruna Husky Animales difíciles, una serie que le ha acompañado casi 20 años, desde 2007, en la que rompe con los límites entre géneros literarios, es una novela distópica que transita entre el thriller, la ciencia ficción y la novela existencial, de amor y de aventuras, la más crepuscular y oscura, de la saga, en la que alerta del peligro, de la amenaza real de la inteligencia artificial (IA) y el uso que pueden darle los totalitarismos. Ambientada en el Madrid de 2111 y con Bruna y el inspector Lizard enfrentados a una mente criminal aterradora, Bruna Husky llena de furia contra el mundo y, sobre todo, contra sí misma, porque ya no es una poderosa tecnohumana de combate, sino un débil androide de cálculo. Y debe afrontar el caso más peligroso de toda su carrera desde esa nueva fragilidad. Animales difíciles plantea aquello que no queremos mirar de frente: la inconsciencia con la que estamos desarrollando una superinteligencia desconocida, un poder absoluto, que no sabemos si seremos capaces de controlar y que puede convertirse en un arma definitiva y brutal. Rosa Montero cierra por todo lo alto la serie de Bruna Husky, formada por las novelas Lágrimas en la lluvia, El peso del corazón y Los tiempos del odio. El último caso de la formidable detective es un apasionante rompecabezas de tensión creciente y final luminoso sobre la identidad, el sentido de la vida y el destino de la Humanidad.

Rosa Montero nos habla de Bruna, profundamente introspectiva, melancólica y obsesionada con su propia mortalidad, ya que los replicantes tienen una vida limitada a diez años, que ahora ha dejado de ser la poderosa replicante de combate de las novelas anteriores para revivir en un nuevo cuerpo mucho más frágil, el de una replicante de cálculo, lo que le ha servido para reflexionar sobre la identidad, uno de los grandes temas de la novela. Montero habla con pasión de su relación de casi dos décadas con Bruna: “Es el personaje que más cercano ha sentido que más tengo que ver con ella y ahora ya está en otro momento vital. A Bruna se le acaba el tiempo, como a todos, pero ella sabe “el cuándo.”, algo terrorífico. Pero, ahora es una replicante de cálculo y se esfuerza por adaptarse a su nuevo cuerpo, a su limitación física. Pero hablamos con Rosa de que le da a Bruna la palabra y ahí está la posibilidad de la identidad: “Sí, en este libro, a diferencia de los tres anteriores, hay capítulos enteros narrados en primera persona por Bruna, que, por recomendación de los nerucinéticos que supervisan su adaptación al cuerpo de cálculo escribe, y descubre que le gusta, y escribe y cuenta y, ella que maldecía a los sintientes, empieza a sentir… hay pasajes escritos por ella de una belleza poética y filosófica extraordinarias. De la crisis de identidad de Bruna a la de la sociedad actual: “La humanidad está en un umbral crítico, nos jugamos hasta la supervivencia, pero también qué tipo de humanidad queremos ser. Porque no saber quiénes somos, qué somos, y vivimos en un mundo tan completamente deslizante tan amenazador, tan roto, que falta mucho entorno para decirnos quienes somos, porque dependemos de la mirada del otro dependemos en general de la mirada de los padres”, afirma Rosa con quien hemos hablado de los neuroderechos que se pretende que sean incluidos en la Declaración de los Derechos Humanos.

La fragilidad de Bruna también es una metáfora de la vejez, de la decrepitud, del tener que adaptarse a un cuerpo que ya no es el que era. Y que Bruna sienta el amor de la amistad, de un hombre, de un “animal de compañía” que la acompaña, que las palabras de un hombre sabio le enseñan, le hacen entender… Para Rosa: “El final de la novela, es uno de los más luminosos de todos mis libros (…) ha sido como colocar las cosas, no solo en la novela que Bruna termina muy bien, sino colocar la mirada al mundo en la mirada a la vida: decir la vida merece la pena vivirla”.

Estamos con esta gran escritora y excelente ser humano en que acaso el sentido de la vida es vivirla, aunque la muerte esté en el final para todos, replicantes y humanos. Gracias, Rosa, por Bruna.

Pegando la Hebra, dirige y presenta, María Vicenta Porcar, control de sonido, Juan Lafuente, 9.9 Valencia Radio, dial 99.9 FM Valencia (España) y www.999valenciaradio.es. PODCAST en la web deemisora, Ivoox, Spotify, Youtube, etc.
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