
últimos Programas

Cinc nuestro o mujeres creadoras: Nuria Labari, Ángeles Caso, Luisa Gavasa, Raquel Sánchez, Almudena Gutiérrez, y un poeta, Lorca, en PLH

La polifacética creadora Raquel Sánchez vuelve a Pegando la Hebra

Nuria Labari presenta en Pegando la hebra su aclamado libro de relatos “No se van a ordenar solas las cosas” Nuria Labari
“Sus cuentos son pequeños universos en los que aún es posible salvar el mundo”
Nuria Labari, prestigiosa escritora y periodista, ha dicho: “Mis primeros cuentos, canciones y diarios son de muy pequeña. Creo que tengo diarios desde los ocho o nueve años hasta los 19. Diarios con entradas de concierto pegadas, abonos de autobús, hojas secas, lágrimas, gotas de sangre y envoltorios de chicles. Deseaba preservar el tiempo y viajar a través de él. A los 16 me escribí una carta a mi yo de 45… esa clase de cosas. A los 20 empecé a escribir con ambición literaria”. Su ambición le ha llevado a publicar en 2009 en Lengua de trapo, el libro de relatos, Los borrachos de mi vida, con el que ganó el VII Premio de Narrativa de Caja de Madrid (Lengua de Trapo 2009); a participar en las antologías, Pequeñas resistencias, de Andrés Neuman, y El diablo apuesta todo; y las novelas, presentadas por ella en PLH, Cosas que brillan cuando están rotas (Círculo de Tiza), La mejor madre del mundo (Random House ) y El último hombre blanco (Random House),; así como El gran libro de los niños extraordinarios, un libro infantil interactivo y “Una de los nuestros«, en la antología Hombres (y algunas mujeres), Zenda. Después de 15 años, vuelve a los cuentos con un libro espectacular publicado por Páginas de espuma, que hoy nos ha presentado en PLH: No se van a ordenar solas las cosas”, título que ha tomado de un poema de Wislawa Szymborska: “Después de cada guerra/ alguien tiene que limpiar./No se van a ordenar solas las cosas, / digo yo”.
Nuria Labari estudió Ciencias Políticas y de la Administración en la Universidad del País Vasco cursó dos años de doctorado en Relaciones Internacionales en el Instituto Ortega y Gasset realizando una investigación sobre la identidad personal. Ha trabajado de Redactora en elmundo.es, Redactora jefa en Marie Claire, ha sido redactora jefa del portal digital telecinco.es. en Telecinco, subdirectora del área multimedia, en Mediaset Directora de estrategia digital en Megamedia y, en la actualidad forma parte del equipo de comunicación de Movistar +. Escribe semanalmente una columna de opinión en El País e imparte talleres literarios, en los que juega y hace jugar con las palabras.
Con Nuria hemos hablado de lo que ha supuesto para ella el regreso al cuento después de 15 años centrada en las novelas, en escribir el libro infantil, algún ensayo y varios cuentos, “pero nunca hasta ahora un libro de cuentos con la unidad y la música que eso implica. He echado mucho de menos el cuento, la verdad. Y, al mismo tiempo, no he podido volver antes. Digamos que no se han dado las condiciones atmosféricas”. Porque, La novela es como un flechazo, como enamorarte, casarte, irte a vivir juntos… la historia completa. El cuento es como enamorarme siete veces en la misma tormenta, una especie de nube en la que te van a caer siete rayos en vez de uno. Nos dice que un libro de cuentos requiere una disposición erótica con la vida y con el mundo, porque no es solamente cazar un rayo y ya tienes un cuento, sino que es una tormenta entera. Llegar a esa tormenta es algo que no me había pasado en los últimos quince años”, afirma con su verbo fácil, fluido y rico. Sigue diciendo que el libro nace de un sentimiento de soledad importante, de la necesidad de escuchar y ser escuchada, de sentirse monstruosa también., como Leonora Carrington y la protagonista del primer relato; que necesitaba saber cómo convive el dolor con un pulso narrativo que dependiera de la luz. Y como no encontraba lo que buscaba, decidió escribirlo ella. Y se dedicó a escuchar voces distintas y las ha puesto a hablar en seis relatos con la ambición de que contuvieran el mundo. La primera frase del libro, La primera frase del es: “Tengo delante las puertas de los armarios de una cocina que no es la mía”. La última dice: “Pero lo cierto es que el día está a punto de empezar”. Hay una conexión entre el inicio y el cierre que pasa por la construcción de una visión del mundo y de un carácter individual al mismo tiempo. “Entre medias, debería caber un mundo, al menos la música del nuestro.”, asevera Nuria.
En el primer cuento, Dios solo entiende palabras esdrújulas’, una mujer que lucha con los monstruos que habitan en ella, dividida entre su vida profesional y su vida familiar, pero en esta ocasión en esa mujer con la que rivaliza no por un ascenso, sino por el amor de sus hijas, es la asistenta que las cuida. En Como si te hubieras olvidado del sentido de vivir, un adolescente con vigorexia, un trastorno relacionado con la dismorfia corporal, intenta sobrevivir a la tremenda hostilidad que sospecha del mundo huyendo de él y encontrando su refugio en la música. El tercero que da nombre al libro, No se van a ordenar solas las cosas:
nos cuenta la historia de la relación entre una mujer y un joven bereber y en cómo se entienden en el tamazight (una de las muchas lenguas bereberes) y con el leguaje de la poesía. Nunca te fíes mí: es una divertida historia en la que un matrimonio con dos niñas contrata una expedición a unos lugareños en el Caribe hasta una famosa cascada. El mundo cuando mueras, plantea la idea de la pre-soledad, de una soledad que se va asimilando cuando todavía no estás sola. Hay alguien que está enfermo y que sabe que se va a ir. La otra persona también lo sabe y empieza a preparar su plan para poder habitar un mundo donde su ser amado ya no le va a acompañar. No soy un alter kaker: es la historia del octogenario, psicoanalista, judío y homosexual, permitiéndose amar. Cuando se le estropea la lavadora con toda la ropa en su interior, rememora sobre lo que ha sido su vida. La “presencia” de Carmen Martín Gaite, muy admirada por Nuria, planea en este relato.
En todos los relatos hay voces, lenguas, nacionalidades, culturas, géneros, clases, diferentes. Nuria Labari quería escuchar y ha escuchado. Y nos propone que lo hagamos también al leerla. Los críticos, los lectores y grandes escritores que lo han hecho han aclamado y cantado su excepcional calidad. Labari ha escrito No se van a ordenar solas las cosas en estado de gracia, poseída por un hálito poético que impregna de belleza hasta los momentos menos gratos de cada relato. “Sus cuentos son pequeños universos en los que aún es posible salvar el mundo”. Labari es una gran escritora y una conversadora excepcional.
Pegando la Hebra, dirige y presenta, María Vicenta Porcar, control de sonido, Juan Lafuente. 99.9 Plaza Radio, dial 99.9 FM Valencia (España) y www.999plazaradio.es. PODCAST en la web de la emisora, Ivoox, Spotify, Youtube, etc.