El actor y escritor Pablo Rivero presenta su novela negra “Matriarca” en Pegando la Hebra Pablo Rivero
El Toni Alcántara de “Cuéntame cómo pasó”, es también un excelente escritor de thrillers
Quién haya seguido o ha visto en alguna ocasión la serie de TVE Cuéntame cómo pasó, creada por Miguel Ángel Bernardeau, Patrick Buckley y Eduardo Ladrón de Guevara, que dijo adiós para siempre tras 22 temporadas en antena. Pablo Rivero tenía 20 años cuando en 2001 empezó a aparecer semanalmente en la serie como, Toni, uno de los hijos de la familia Alcántara. Durante años compaginó ese papel con los estudios: hizo dos años de Periodismo, acabó la carrera de Comunicación Audiovisual y pasó por la escuela de Cristina Rota. Como actor, ha participado en las películas, De tu ventana a la mía de Paula Ortiz, Proyecto tiempo de Isabel Coixet, No me pidas que te bese porque te besaré de Albert Espinosa, y en montajes teatrales como La caída de los dioses dirigido por Daniel Veronese y La importancia de llamarse Ernesto. Como escritor es autor de las novelas: No volveré a tener miedo, Penitencia, Las niñas que soñaban con ser vistas, La cría, Dulce hogar y La matriarca, publicada este año.
La matriarca, en la que aparecen de nuevo personajes de novelas anteriores como Candela, la teniente de la Guardia Civil, cuenta la historia de Felicidad, a quien le gusta mucho la serie Se ha escrito un crimen, es una mujer que a sus 80 años a es independiente y gestiona los alquileres del bloque de pisos del que es propietaria. Pero ahora siente que quieren apartarla, dejándola de lado en la toma de decisiones y haciéndole sentir que ya no puede hacer todo aquello que siempre hizo. Todo cambian cuando una de las vecinas del edificio se precipita al vacío, iniciándose una investigación para descartar un posible homicidio. La repentina desaparición de Felicidad, cuando estaba cobrando los alquileres, hará que todo se complique y que la policía ponga el punto de mira en la comunidad de vecinos y en su entorno familiar.
Pablo Rivero de una sencillez y naturalidad apabullantes, nos ha hablado de que la escritura es que nació desde el juego y desde una pasión que tenía desde pequeño, la de inventar historias. “Al principio, era muy introvertido y nunca me vi como un escritor. Empecé a escribir la primera novela cuando tenía 18, pero que le llevó años enviarlas as las editoriales, me daba mucho pudor presentarlo a una editorial porque, además, sentía esa losa de ser el de cuéntame.” Pero ante la buena acogida del libro dice: «De repente cuando sales y empiezas a recibir mensajes y comentarios o ver reseñas y a notar que está surgiendo efecto, que la novela está funcionando, es muy gratificante”. Escribir “La matriarca”, se lo tomó como si fuera un ensayo e investigó sobre las vulnerabilidades de la tercera edad,; de la fragilidad de los vínculos familiares y la delicada forma de vida de las personas en riesgo de exclusión; de cómo son tratados y/o percibidos por la sociedad cuando ya no son considerados individuos útiles, cuando ya están “amortizados”, y la necesidad estas personas de sentirse validados por los demás; de los riesgos de estafas y robos as a los que están expuestos con las nuevas tecnologías; de su exposición en las redes sociales, haciendo uso de sus debilidades con el único objetivo de conseguir un like; del del edadismo, de la soldad… Una investigación que ha ficcionado magníficamente, creando “La matriarca”, una novela una atmósfera asfixiante y manejando a la perfección el suspense psicológico y una ambientación real de creciente tensión y crudeza que nos adentra en la trama de un thriller costumbrista, inquietante y descarnado sobre los secretos que esconden las familias de puertas para adentro, y los conflictos que supone el hecho de vivir en una comunidad. En la comunidad, en casa de Felicidad y en el cuartel de la guardia civil es donde se mueve los personajes de la novela: Felicidad, sus tres hijos, Noemí, José Ignacio y Álvaro su hijo, José Antonio y su mujer Ariela; los vecinos de la comunidad, como el inquietante Andrés; los guardias civiles, Candela, Sandra Barbie, Mateo o Jesús. A través de todos ellos quiere también hacer un homenaje todas esas mujeres que han sido y son el eje fundamental de su familia, por la que han luchado día a día. Pablo Rivero nos cuenta que es muy consciente de sus contradicciones.: “Intento llevarlas bien y hacer la vida fácil a la gente que tengo te d alrededor. Trato de disfrutar de mis amigos, intentaré dejarle un mundo mejor a mi hijo, le enseño a no tener prejuicios, a no ser radical y a que no hay que lapidar a nadie.”
Con capítulos cortos que se van precipitando con revelaciones, giros, saltos temporales y los buenos diálogos, el lector va teniendo más información que la propia teniente Candela que interroga a la familia de Felicidad y a los inquilinos. Todos tiene secretos. “Es un thriller porque todo el mundo de alrededor quiere sacar partido. Y es terrible.»
Pablo Rivero, se mueve en el suspense como pez en el agua y logra sorprender al lector constantemente y sus tramas hacen sentir ese desasosiego moral de creer no estar haciendo lo correcto en la vida en general. Claramente se consolida como autor del nuevo thriller con su sexta novela, «La matriarca».
Pegando la Hebra, dirige y presenta, María Vicenta Porcar, control de sonido, Juan Lafuente. 99.9 Valencia Radio, dial 99.9 FM Valencia (España) y www.la999.es. PODCAST en la web de la emisora, Ivoox, Spotify, Youtube, etc.